Esta es quizá una de las preguntas más frecuentes en mi consultorio (¡y en GOOGLE!). Sin embargo, no existe una respuesta única.
Las cirugías, a diferencia de productos estáticos (televisores, autos, medicamentos, insumos), son un servicio que abarca demasiados factores y para los cuales los cirujanos nos entrenamos durante varios años. Así que, si recibes en alguna parte un valor sobre una cirugía de alguien que ni siquiera te ha evaluado personalmente, ¡no te confíes! El precio puede variar enormemente, bien sea para arriba o para abajo, una vez se evalúe tu caso particular.
Empecemos por decir que no todas las hernias son iguales. Es decir, una hernia umbilical difiere mucho de una hernia inguinal y esta a su vez es totalmente diferente de una hernia incisiones. Estas diferencias son particularmente anatómicas (lugar del abdomen), y por ende, la técnica utilizada será diferente para cada una de ellas.
Entendiendo esto, continuemos por decir que el tiempo de quirófano, el tipo de anestesia (local, regional, general) y los insumos utilizados (suturas, mallas y fijadores) también serán variables en cada caso.
Además, recordemos que cada caso es diferente. Debemos tener en cuenta si sufres de alguna enfermedad, tomas algún medicamento, tienes dispositivos implantables como marcapasos o si te han operado ya previamente en dicha zona y todo esto involucra cambios en la conducta que pueden hacer que el precio varíe. Es tal la necesidad de una evaluación adecuada preoperatoria, que de esto depende la elección de en qué clínica operarte y aquí nuevamente hay variaciones significativas en los valores, siempre pensando que tengas todos los recursos disponibles para que tu experiencia antes, durante y después de la cirugía sea satisfactoria.
Finalmente, recuerda que no estamos cobrando solo por el hecho de operar. Particularmente cuando te ofrezco un valor determinado debes entender que allí estás recibiendo el esfuerzo de un trabajo en equipo que abarca secretarias, anestesiólogos, instrumentadores, auxiliares de enfermería, citas de revisión pre y postoperatorias para el seguimiento e insumos que pueda requerir tu cirugía.
Si posterior a conocer el precio de tu cirugía, no estas satisfecho o tranquilo, ¡recuerda que como paciente estás en todo derecho de solicitar segundas y terceras opiniones. Lo más importante es que cuando decidas poner tu salud en manos de un profesional, tengas en cuenta que el precio no debe ser el principal factor que evaluar, sino tu seguridad, tranquilidad y satisfacción durante este proceso que es tu cirugía.